'

martes, 20 de marzo de 2012

Sin cementerio, prohibido morirse.



El alcalde de la localidad italiana de Falciano del Massico, ha prohibido por ordenanza que sus habitantes se mueran. La delirante norma se debe a que el pueblo utilizaba el cementerio del pueblo vecino. "El error se produjo cuando quien llevó a cabo la división del territorio no se dio cuenta de que debía incluir también una parte del cementerio", explicó el alcalde Giulio Cesare Fava.
Francamente hilarante de ambas partes. Por un lado, ¿a quién se le ocurre dejar a una localidad sin cementerio? Pero por otro, ¿en qué cabeza cabe que la solución al problema es prohibirle a la gente que se muera?
Ya sabemos que una ley puede más que una ordenanza. Y si es una ley natural de la vida, ni hablar. Así que de los aproximadamente 4000 habitantes de la localidad, ya hubo dos que incumplieron con lo dictado por el alcalde (que curioso: ¿cómo pensará sancionarlos?).  Algunos otros habitantes ya habrían adelantado su decisión de no respetar la norma, aunque no piensan hacerlo en un futuro próximo ni tampoco esperar a que Fava colecte los fondos para construir un cementerio propio.

Fuentes: NPC

0 comentarios:

Publicar un comentario